D. Isidro Rubio, misionero en Venezuela, nos ha mandado esta carta de agradecimiento a toda la Comunidad Educativa del CPEIP «Virgen de Gracia» después de recibir el dinero recaudado en el Mercadillo Solidario 2014.
Éste es el texto:
Centro Escolar
Virgen de Gracia.
Cárcar – Navarra.
Queridos amigos:
Englobo en este encabezamiento a todos ustedes, padres y representantes, profesores y alumnos de esa escuela de Cárcar, que habéis tenido a bien acordaros de mi y del proyecto misionero que ejerzo en esta ciudad de Rubio (Venezuela) desde hace varios años.
Gracias por este recuerdo y gracias también por el donativo. Ambas cosas se agradecen mucho estando lejos de la patria y careciendo de muchas necesidades pedagógicas y pastorales elementales propias de toda educación y evangelización modernas.
Vuestro donativo llegó a mi a través de mi sobrina Mari Carmen y será empleado enteramente en la adquisición de un PROYECTOR (Video Being) con fines académicos para los niños – principlamente los más pequeños de primer grado – de este colegio parroquial llamado «María Inmaculada» donde estoy y donde trabajo desde hace varios años.
Este colegio no se parece en nada al que tenéis ahi en Cárcar. El de aquí es más humilde y está construido en un estilo típico de la Región Andina de Venezuela. Sin embargo, tiene más alumnos que el vuestro; en la actualidad cuenta con 560 niños y niñas de 4 a 12 años. Es decir, el preescolar y la primaria, con dos secciones por grado, una por la mañana y otro por la tarde.
Es un colegio Parroquial. Quiere esto decir que está bajo la dirección de la parroquia y se fundó en el año 1925 con la finalidad de educar y formar a los niños en valores cristianos.
En las dependencias de este colegio se prepara también a los niños de primera comunión y de confirmación y se reunen los grupos pastorales, tales como Legión de María y Renovación Carismática.
Este proyecto nos ayudará, como les acabo de decir, a potenciar las tareas y los conocimientos escolares del centro impulsando su comprensión y captación.
Una vez más gracias por ello y que Dios le premie este acto de generosidad caritativo y misionero.
Mi bendición para todos.
Padre Isidro Rubio OP.
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